lunes, 27 de enero de 2014

Francia30 -27España

España se quedó a las puertas de jugar la final del Europeo de Dinamarca al caer derrotada por Francia por 30-27. Otra vez los galos se cruzaron en el camino de los 'Hispanos' que, como siempre, no dieron su brazo a torcer hasta los minutos finales. Aún queda la consolación de luchar por el bronce, el próximo domingo a las 15:00 horas contra Croacia. La lástima es que se pudo llegar al otro camino, el que permitía buscar la gloria eterna. Sin realizar un gran encuentro, España se mantuvo en pie en todo momento. Francia no demostró ser superior, pero fue más inteligente en los momentos claves en un partido extraño. Hubo momento en los que parecía que ninguno de los dos quería ganar o, mejor dicho, no sabía cómo hacerlo. Así vivimos minuto a minuto el duelo entre Francia y España Los franceses dieron con la tecla cuando debían hacerlo, mientras que los de Cadenas no supieron gestionar bien las superioridades numéricas. Demencial el momento en el que fueron dos más en pista y el tiro salió por la culata. Y no fue la única vez que sucedió algo parecido. Para colmo, hubo jugadores que no tuvieron su mejor día. A Maqueda se le vio desquiciado desde el pitido inicial, quizás por un exceso de motivación. La portería tampoco terminó de aparecer. Y los extremos apenas fueron trascendentes. Todo el juego lo canalizaron los laterales y el central. Entrerríos y Cañellas, especialmente resumen el partido entre galos y españoles Fue una pena, porque la selección se repuso a un horrible inicio. Omeyer empezó parando todo, desquiciando a todo aquel que osaba tirar hacia su portería. Poco a poco la diferencia fue subiendo hasta que Francia se vio con una cómoda ventaja de seis goles a los 19 minutos (11-6). Parecía que no iba a haber partido, pero entonces España sacó su furia -y su calidad- para hacer un final de primera parte sublime. Cañellas, el mejor ‘Hispano’ del torneo y, seguramente, uno de los que debería estar en el siete ideal, se echó el equipo a las espaldas. Con un parcial de 1-8, el combinado nacional terminó yéndose al descanso dos arriba y con la sensación de que el partido era suyo. Pronto se tiró la renta en la segunda mitad. A los seis minutos Francia ya estaba dos tantos por encima. España no volvió a ponerse por delante, aunque sí llegó a poner las tablas en el minuto 42. El encuentro estuvo parejo, sin que nadie se diera por vencido. Sin embargo, la historia dice que en los partidos igualados contra Francia siempre nos falla algo en el momento de la verdad cuando hay cosas serias en juego. y esta vez no fue menos. Abalo y Porte como goleadores, Karabatic como asistente y un gran Dumoulin, que recogió el testigo de Omeyer en la portería, nos liquidaron. Se sigue resistiendo el Europeo, pero a los campeones del mundo seguro que aún les queda hambre para traerse de vuelta un bronce.