El Valencia Basket se llevó el triunfo en el Santiago Martín por 74-81, en un partido que empezó a controlar en los últimos instantes del segundo cuarto y supo mantener las diferencias hasta el final del choque, pese a que el Iberostar Tenerife lo puso, en ocasiones, en serios apuros.
Los laguneros acusaron, quizás, ese gran esfuerzo que realizaron el pasado jueves ante el Herbalife Gran Canaria, puesto que hoy no se les vio tan fresco, aunque si intentaron en todo momento no salir del partido, pero les faltó el acierto en los lanzamientos y algunas lagunas defensivas que aprovechó el rival para tomar diferencias.
También el Valencia mostró su mejor versión y dejó claro que es un equipo muy compacto y muy equilibrado entre sus líneas.
Fue en los últimos minutos del segundo cuarto cuando el cuadro levantino tomó el control del partido debido a una mayor intensidad defensiva y a un Guillem Vives que supo sacar provecho de la floja defensa de los bases canaristas, y anotó siete puntos consecutivos que puso a su equipo 28-35 (min.17).
Antes, máxima igualdad entre los dos equipos y muchas alternativas en el marcador, y Sekulic, por el Iberostar Tenerife, y Dubjevic, por el Valencia, eran los hombres más destacados hasta el momento, pero fue el pívot del Valencia quien más problemas ponía a la defensa insular.
Pese a todo, el partido no tenía un dominador claro y las alternativas en el electrónico eran constantes. El primer cuarto terminó con ventaja local por dos puntos (21-19), un equipo lagunero que tenía problemas en frenar a los pívot visitantes, pero de resto muy metido en el choque.
En el segundo, con el mencionado tirón que dio Guillem Vives el Valencia que empezó a hacerse con el mando del choque, y tras el descanso y con un marcador de 36-44, el Valencia aprovechó para subir el nivel de intensidad de su defensa.
Van Rossom y Rafa Martínez anotaron dos triples consecutivos que pusieron el marcador en un preocupante 36-50 (min.23), y ni los cambios ni los tiempos muertos solicitados por Alejandro Martínez lograron rebajar esas diferencias, aunque tampoco el Valencia logró romper definitivamente el choque.
En los últimos diez minutos, el Iberostar Tenerife lo volvió a intentar, Uriz anotó un triple (53-62) y otro de Blanco (56-63, min. 32) dejaban soñar aún con el milagro de la remontada a los insulares.
El Iberostar Tenerife presionó más en defensa, apuró hasta el final, pero el Valencia, aprovechando su ventaja en el marcador y el acierto que tuvo en momentos claves terminó por decidir este compromiso (74-81), con el que los locales prácticamente dicen adiós a los 'play-off' por el título.
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